Documental sobre Tekashi 6ix9ine muestra cómo el rapero se volvió un criminal
En septiembre de 2019, se hizo público que el rapero Tekashi 6ix9ine había testificado en contra de los miembros de la que fue su banda criminal, Nine Trey Gangsta Bloods, pues buscaba conseguir una sentencia más indulgente, luego de haberse declarado culpable de nueve cargos en su caso federal por drogas y armas.
Luego, en abril de este 2020, el artista, cuyo nombre real es Daniel Hernandez, salió de prisión para cumplir el resto de su condena desde casa, debido al riesgo de contagio por coronavirus, y ahora que se cumplen dos años del arresto del estadounidense, se ha lanzado el documental ’69: The Saga Of Danny Hernandez’ en la plataforma Hulu.
Este filme combina la investigación documental con el retrato de una historia de gangsters de la vida real, y desmenuza la carrera de Tekashi69, quien en varias ocasiones rompió internet con sus videos musicales y sus críticas en las redes sociales.
El director Vikram Gandhi (‘Kumaré’, ‘Barry’) se acercó personalmente a los habitantes del vecindario que conocían a 69 cuando todavía era Danny Hernandez, antes de convertirse un chico rudo lleno de tatuajes. El objetivo del cineasta fue descubrir cómo ocurrió el ascenso meteórico de Tekashi, y cómo fue que se dio su adicción a la fama en la era digital.
«Todas mis películas exploran la identidad, específicamente la vida interior de figuras carismáticas. Me fascina la diferencia entre la persona percibida en la superficie y la persona real que se encuentra debajo», dijo el cineasta en un comunicado oficial, acerca de su trabajo sobre el rapero que ahora tiene 24 años.
«Las redes sociales han hecho que esta distinción sea aún más profunda y ninguna historia transmite mejor esta nueva crisis del yo digital que la breve carrera de Tekashi69. Con casi 15 millones de seguidores en Instagram, la huella digital de Tekashi69 fue una fuerza global. Lo que lo hizo tan fascinante fueron las contradicciones construidas en su propia existencia: un niño mexicano con tatuajes faciales y cabello de arcoíris gritando la palabra con n, haciendo alarde de afiliación a una pandilla, propiciando problemas y publicando sus propios actos violentos en línea», agregó el también productor, que estudió en la Universidad de Columbia.
Hubo una pequeña coincidencia en las vidas de Vikram y Tekashi, que hizo que el realizador pusiera el ojo sobre el rapero. «Cuando me di cuenta de que 69 vivía cerca de mí en Brooklyn, y que había frecuentado la bodega en la que solía trabajar, llamé a su mánager para hablar sobre la realización de este documental. Nunca recibí respuesta», contó en el comunicado.
Pero luego, algo cambió el juego. «Unos meses más tarde, Tekashi69 fue arrestado con cargos federales y enfrentaba de 47 años a cadena perpetua. Poco después, comenzó a cooperar con el FBI para condenar a miembros de la misma pandilla que alguna vez lo había apoyado», añadió Gandhi, para explicar cómo fue creciendo su interés en el rapero.
«Después de años de viajar por el mundo como periodista de investigación, me vi obligado a explorar esta historia de crímenes reales en mi ciudad natal. Volver sobre los pasos de Danny reveló una saga rara y única en Nueva York: en las mismas cuadras de Brooklyn, donde un condominio se vende por millones de dólares, estaban ocurriendo los tiroteos, robos y secuestros relacionados con Tekashi69», explicó Vikram.
Finalmente, el director expuso que considera importante prestar atención a esta historia que se le salió de las manos a un chico que solo deseaba fama. «Creo firmemente que el núcleo de la filmación de documentales es el acceso, sentarse con la gente y escucharla realmente. A medida que avanzaba en la historia, conocí a un variopinto grupo de personalidades que fueron parte integral del desarrollo de Tekashi69 como artista y celebridad. Danny Hernandez deseaba tanto ser famoso que fue devorado por su avatar digital, Tekashi69».