La decimosexta edición del Festival Internacional de Cine de Gibara comenzó este martes en la oriental provincia de Holguín, ubicada a unos 740 kilómetros de la capital cubana, La Habana.
El encuentro, que se extiende hasta el próximo 6 de agosto, se realiza tras una pausa de dos años debido a la situación epidemiológica generada por la pandemia de la COVID-19 en la isla.
En total, 45 obras de diferentes nacionalidades y géneros están en concurso al tiempo que personalidades del mundo del cine nacional y extranjero son parte de los jurados en las categorías de animación, ficción y documental.
El director general del certamen, Sergio Benvenuto, aseguró a la prensa local que este es un espacio para promover la creación audiovisual en un contexto económico complejo a nivel internacional.
«Al no realizar una convocatoria como en ediciones anteriores, este es un festival de curaduría, a partir de obras en las diferentes categorías que permitan configurar muestras internacionales competitivas», agregó.
Bajo el lema «Volver al cine» el festival abrió sus sesiones con los filmes españoles Rosa Rosae y Libertad al tiempo que reserva para este miércoles el inicio del evento teórico con un panel sobre los retos en la dirección de cine en la actualidad.
Fundado en 2003 en la ciudad de Gibara por el destacado cineasta cubano Humberto Solás bajo el nombre de «Festival de Cine Pobre», este constituye el segundo evento de su tipo en Cuba después del Festival Internacional de Cine Latinoamericano de La Habana.
La nación caribeña reanudó la programación de actividades culturales en el segundo semestre de 2021 tras la gradual entrada del país a la nueva normalidad en el contexto de la pandemia de la COVID-19.
Fuente Xinhua