EE.UU. cancela oficialmente 83% de los programas de la USAID

EE.UU. cancela oficialmente el 83% de los programas de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID). Esta decisión fue anunciada por el secretario de Estado, Marco Rubio, tras una revisión de seis semanas.
La cancelación afecta a 5,200 contratos que, según Rubio, gastaron decenas de miles de millones de dólares en formas que no sirvieron, y en algunos casos incluso perjudicaron, los intereses nacionales de Estados Unidos. El 18% restante de los programas, aproximadamente mil, será administrado de manera más eficaz bajo el Departamento de Estado.
La USAID también ha despedido a 1,600 empleados de su nómina y ha colocado a la mayoría de los trabajadores restantes en baja administrativa. A partir del 23 de febrero de 2025, todo el personal directamente contratado por la USAID, excepto aquellos responsables de funciones críticas en misión, liderazgo básico y/o proyectos especialmente designados, estará de baja administrativa en todo el mundo.
Esta medida forma parte de una serie de políticas de recortes impuestas por la administración de Donald Trump, que busca reducir al mínimo el papel de la USAID. La decisión ha generado controversia, ya que muchas organizaciones humanitarias temen que la reducción de fondos ponga en riesgo la vida de las poblaciones más vulnerables.
La USAID, creada en 1961, es responsable de distribuir ayuda humanitaria a través de programas de salud y emergencia en 120 países. Hasta ahora, su presupuesto anual ascendía a 42,800 millones de dólares, lo que representaba el 42% de la ayuda humanitaria global.
La cancelación de estos programas marca un cambio significativo en la política exterior de Estados Unidos y plantea interrogantes sobre el futuro de la ayuda humanitaria a nivel mundial.