Ruptura total con los prejuicios de género en la tecnología. Es el objetivo del equipo nórdico de VIRTUE y Copenhagen Pride con la creación de Q, el primer asistente de voz neutro (es decir, no suena ni como un hombre ni como una mujer), que ha sido presentado en South by Southwest (SXSW), uno de los mayores festivales del mundo sobre el impacto de la tecnología en la sociedad, celebrado esta semana en Austin, Texas, (EE UU), reseñó el portal web El País.
Las empresas tecnológicas se han dado cuenta de que los usuarios prefieren una voz masculina o femenina dependiendo del escenario pero, ¿qué pasa con los que desean una voz que no corresponda a ninguno de los géneros tradicionales? Hasta ahora, la voz masculina se utiliza generalmente en roles más autoritarios, como en aplicaciones de banca o seguros; mientras que la voz femenina se usa en roles más orientados al servicio, como Alexa de Amazon, Siri de Apple o Cortana de Microsoft. La llegada de Q marcará el fin de estos estereotipos.
La investigadora sobre comportamiento humano e interacción de robots Julie Carpenter cree que no existe ninguna razón para que no exista una tercera opción. “Incorporar la perspectiva de género en la tecnología puede ayudar a la gente a adaptar técnicas y sentirse más cómodo”, asegura. Carpenter se refiere a todas las personas que aunque sus características físicas corresponden a hombre o mujer, ellos sienten que su identidad no tiene por qué ser una u otra, (género no binario o tercer género).
Uno de los creadores de Q, Emil Asmussen asegura que la gente está sorprendida de que aún no existiera. “Los no binarios dicen que abrir el teléfono y tener una tercera opción hace que se sientan incluidos”.
El desarrollo de una voz neutra ha sido posible gracias a las investigaciones de Anna Jørgensen, una lingüista de la Universidad de Copenhage, que ha utilizado su investigación académica para definir los parámetros de una voz con género no binario. Los investigadores comenzaron a trabajar en el proyecto en verano del año pasado. Grabaron cinco voces que no tenían los parámetros de voz femenina o masculina. Utilizaron un software específico de modulación y modificaron las voces a un rango neutral establecido mediante investigación.