Con el propósito de mantener una piel sana es necesario mantenerla limpia e hidratada y en especial el cutis de mujeres y hombres. Sin embargo, son las féminas quienes se dedican a cuidar su rostro con más vocación.
Para cuidar la piel es imprescindible tener en cuenta su naturaleza, se debe elegir primero los productos adecuados para cada tipo de piel. Por ejemplo, la piel seca tiene diferentes necesidades de la piel grasa y algunas partes del rostro como los ojos y labios tienen una piel especialmente fina y frágil, por lo tanto requieren de un cuidado especial.
En este sentido, el cuidado de la piel sensible comienza con la limpieza. Para no atacar la piel y conservar su equilibrio, se recomienda aplicar desmaquillantes fisiológicos, especialmente formulados.
También se debe tomar en cuenta que la piel del contorno de los ojos es diez veces más fina que la del resto del rostro, así que para su limpieza, se debe elegir una rutina específica. Mientras que para el resto del cutis, se recomienda aplicar un exfoliante adaptado una a dos veces por semana. Debe ser eficaz, a la vez que suave y respetuoso con la piel.
Para mantener un buen nivel de hidratación, se debe utilizar un cuidado diario hidratante en el cutis, que equilibre el nivel de agua en el corazón de la piel, tomando en cuenta que la dermis está compuesta en un 70% de agua, y la epidermis en un 15%.
Como parte esencial de las rutinas también se aconseja utilizar maquillajes hipoalergénicos, protectores solares e hidratar los labios.